Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Corintios 15:36-38 verso por verso
Necio, lo que tú siembras no llega a tener vida a menos que muera.
Y lo que siembras, no es el cuerpo que ha de salir, sino el mero grano, ya sea de trigo o de otra cosa.
Pero Dios le da un cuerpo como quiere, a cada semilla su propio cuerpo.