Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Corintios 8:8-46 verso por verso
Pero no es la comida lo que nos recomienda a Dios; pues ni somos menos si no comemos, ni somos más si comemos.
Pero miren que esta su libertad no sea tropezadero para los débiles.
Porque si alguien te ve a ti que tienes conocimiento, sentado a la mesa en el lugar de los ídolos, ¿no es cierto que la conciencia del que es débil será estimulada a comer de lo sacrificado a los ídolos?
Así, por el conocimiento tuyo se perderá el débil, un hermano por quien Cristo murió.
De esta manera, pecando contra los hermanos e hiriendo sus débiles conciencias, contra Cristo están pecando.
Por lo cual, si la comida es para mi hermano ocasión de caer, yo jamás comeré carne, para no poner tropiezo a mi hermano.