Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Reyes 10:5-8 verso por verso
los manjares de su mesa, las sillas de sus servidores, la presentación y las vestiduras de sus siervos, sus coperos y los holocaustos que él ofrecía en la casa del SEÑOR; y se quedó sin aliento.
Entonces dijo al rey: “¡Era verdad lo que había oído en mi tierra de tus cosas y de tu sabiduría!
Yo no creía las palabras hasta que vine, y mis ojos lo han visto. Y he aquí que no se me había contado ni la mitad. En sabiduría y en bienes tú superas la fama que yo había oído.
¡Dichosos tus hombres, dichosos estos servidores tuyos que continuamente están de pie delante de ti y escuchan tu sabiduría!