Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Reyes 3:24-27 verso por verso
— Y el rey añadió — : ¡Tráiganme una espada! Trajeron la espada ante el rey,
y enseguida dijo el rey: — ¡Partan al niño vivo en dos, y den la mitad a la una y la otra mitad a la otra!
Entonces la mujer de quien era el hijo vivo habló al rey, porque sus entrañas se conmovieron por su hijo, y dijo: — ¡Ay, señor mío! Den a esta el niño vivo; no lo maten. Pero la otra dijo: — No será ni para mí ni para ti. Pártanlo.
El rey respondió diciendo: — Den a aquella el hijo vivo. No lo maten; ella es su madre.