Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Reyes 9:10-27 verso por verso
Aconteció al cabo de veinte años, durante los cuales Salomón había edificado las dos casas (la casa del SEÑOR y la casa del rey,
para las cuales Hiram, rey de Tiro, había proporcionado a Salomón madera de cedro y de ciprés y oro, conforme a todo su deseo), que el rey Salomón dio a Hiram veinte ciudades en la tierra de Galilea.
Pero cuando Hiram salió de Tiro para ver las ciudades que Salomón le había dado, no le agradaron.
Y comentó: “¿Qué ciudades son estas que me has dado, hermano mío?”. Y se las llama Tierra de Cabul, hasta el día de hoy.
Hiram había enviado al rey cuatro mil kilos de oro.
Esta es la razón de la leva que el rey Salomón realizó: edificar la casa del SEÑOR, su propia casa, el Milo, la muralla de Jerusalén, Hazor, Meguido y Gezer.
(El faraón, rey de Egipto, había subido y tomado Gezer, y la había incendiado; había dado muerte a los cananeos que habitaban en la ciudad y la había dado como dote matrimonial a su hija, la mujer de Salomón.
Y Salomón reedificó Gezer). También reedificó Bet-jorón Baja,
Baalat, Tadmor en el desierto del país;
y todas las ciudades almacenes que tenía Salomón, las ciudades para los carros y las ciudades para los jinetes; todo lo que Salomón se propuso edificar en Jerusalén, en el Líbano y en toda la tierra bajo su dominio.
A todo el pueblo que había quedado de los amorreos, heteos, ferezeos, heveos y jebuseos (que no eran de los hijos de Israel,
sino sus descendientes que habían quedado después de ellos en la tierra, a quienes los hijos de Israel no pudieron exterminar), Salomón los sometió a tributo laboral, hasta el día de hoy.
Pero a ninguno de los hijos de Israel sometió a servidumbre; porque ellos eran hombres de guerra, sus servidores, sus oficiales, sus comandantes, los jefes de sus carros y sus jinetes.
Estos jefes de los oficiales que Salomón tenía sobre la obra eran quinientos cincuenta, los cuales mandaban sobre la gente que hacía la obra.
También la hija del faraón subió de la Ciudad de David a su casa que Salomón le había edificado. Luego él edificó el Milo.
Tres veces al año Salomón ofrecía holocaustos y sacrificios de paz sobre el altar que había edificado al SEÑOR, y quemaba incienso delante del SEÑOR, cuando había terminado el templo.
El rey Salomón también construyó una flota en Ezión-geber, que está junto a Eilat, a orillas del mar Rojo, en la tierra de Edom.
Hiram envió en la flota a sus siervos, marineros y conocedores del mar, junto con los siervos de Salomón.