Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Samuel 11:6-10 verso por verso
Y cuando Saúl oyó estas palabras, el Espíritu de Dios descendió con poder sobre él, y se encendió su ira en gran manera.
Él tomó un par de bueyes, los cortó en pedazos y los envió por medio de mensajeros a todo el territorio de Israel, diciendo: “Así se hará con los bueyes del que no salga tras Saúl y Samuel”. Entonces el temor del SEÑOR cayó sobre el pueblo, y salieron como un solo hombre.
Saúl les pasó revista en Bezec: Los hijos de Israel eran trescientos mil, además de treinta mil hombres de Judá.
Y a los mensajeros que habían venido les dijeron: “Así dirán a los hombres de Jabes, en Galaad: ‘Mañana, a la hora de más calor, serán librados’”. Los mensajeros llegaron y lo dijeron a los hombres de Jabes, quienes se alegraron.
Entonces los hombres de Jabes respondieron a sus enemigos: — Mañana nos rendiremos a ustedes, para que hagan con nosotros todo lo que les parezca bien.