Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Samuel 13:19-21 verso por verso
En toda la tierra de Israel no había un solo herrero, porque los filisteos habían dicho: “No sea que los hebreos se hagan espadas o lanzas”.
Todos los israelitas iban a los filisteos para afilar cada uno su reja de arado, su azadón, su hacha o su hoz.
El afilado costaba siete gramos de plata, tanto para las rejas de arado, como para los azadones, los tridentes, las hachas o para afinar las aguijadas.