Explicación, estudio y comentario bíblico de 1 Tesalonicenses 3:1-2 verso por verso
Por lo cual, como no pudimos soportarlo más, nos pareció bien quedarnos solos en Atenas,
y enviamos a Timoteo, nuestro hermano y colaborador de Dios en el evangelio de Cristo, para afirmarlos y animarlos en su fe;