• 2 Corintios 11:13

    Porque los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos disfrazados como apóstoles de Cristo.

  • 2 Corintios 11:14

    Y no es de maravillarse, porque Satanás mismo se disfraza como ángel de luz.

  • 2 Corintios 11:15

    Así que, no es gran cosa que también sus ministros se disfracen como ministros de justificación cuyo fin será conforme a sus obras.

  • 2 Corintios 11:16

    Otra vez digo: que nadie me tome por loco. Pero si no, recíbanme aunque sea como a loco para que me gloríe siquiera un poquito.

  • 2 Corintios 11:17

    Lo que ahora digo, no lo digo según el Señor, sino como en locura, con esta base de jactancia.

  • 2 Corintios 11:18

    Ya que muchos se jactan según la carne, también yo me jactaré.

  • 2 Corintios 11:19

    Pues con gusto toleran a los locos, siendo ustedes sensatos.

  • 2 Corintios 11:20

    Porque lo toleran si alguien les esclaviza, si alguien les devora, si alguien se aprovecha de ustedes, si alguien se ensalza, si alguien les hiere en la cara…

  • 2 Corintios 11:21

    Con vergüenza lo digo, como que hemos sido débiles. Pero en lo que otro se atreva (hablo con locura), yo también me atrevo.

  • 2 Corintios 11:22

    ¿Son hebreos? Yo también. ¿Son israelitas? Yo también. ¿Son descendientes de Abraham? Yo también.

  • 2 Corintios 11:23

    ¿Son ministros de Cristo? (Hablo como delirando). ¡Yo más! En trabajos arduos, más; en cárceles, más; en azotes, sin medida; en peligros de muerte, muchas veces.

  • 2 Corintios 11:24

    Cinco veces he recibido de los judíos cuarenta azotes menos uno;

  • 2 Corintios 11:25

    tres veces he sido flagelado con varas; una vez he sido apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado en lo profundo del mar.

  • 2 Corintios 11:26

    Muchas veces he estado en viajes a pie, en peligros de ríos, en peligros de asaltantes, en peligros de los de mi nación, en peligros de los gentiles, en peligros en la ciudad, en peligros en el desierto, en peligros en el mar, en peligros entre falsos hermanos;

  • 2 Corintios 11:27

    en trabajo arduo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez.

  • 2 Corintios 11:28

    Y encima de todo, lo que se agolpa sobre mí cada día: la preocupación por todas las iglesias.

  • 2 Corintios 11:29

    ¿Quién se enferma sin que yo no me enferme? ¿A quién se le hace tropezar sin que yo no me indigne?

  • 2 Corintios 11:30

    Si es preciso gloriarse, yo me gloriaré de mi debilidad.

  • 2 Corintios 11:31

    El Dios y Padre de nuestro Señor Jesús, quien es bendito por los siglos, sabe que no miento.

  • 2 Corintios 11:32

    En Damasco, el gobernador bajo el rey Aretas guardaba la ciudad de los damascenos para prenderme;

  • 2 Corintios 11:33

    pero fui descolgado del muro por una ventana en una canasta, y escapé de sus manos.

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