Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Corintios 4:8-11 verso por verso
Estamos atribulados en todo pero no angustiados; perplejos pero no desesperados;
perseguidos pero no desamparados; abatidos pero no destruidos.
Siempre llevamos en el cuerpo la muerte de Jesús por todas partes para que también en nuestro cuerpo se manifieste la vida de Jesús.
Porque nosotros que vivimos, siempre estamos expuestos a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal.