Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Corintios 6:11-18 verso por verso
Nuestra boca ha sido franca con ustedes, oh corintios; nuestro corazón está abierto.
No están limitados en nosotros; lo están en su propio corazón.
Pues para corresponder del mismo modo, como a hijos les hablo: ¡Abran ustedes también su corazón!
No se unan en yugo desigual con los no creyentes. Porque ¿qué compañerismo tiene la rectitud con el desorden? ¿Qué comunión tiene la luz con las tinieblas?
¿Qué armonía hay entre Cristo y Belial? ¿Qué parte tiene el creyente con el no creyente?
¿Qué acuerdo puede haber entre un templo de Dios y los ídolos? Porque nosotros somos templo del Dios viviente, como Dios dijo:
Por lo cual,