Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Juan 1:5-11 verso por verso
Y ahora te ruego, señora, no como si te escribiera un nuevo mandamiento sino el mismo que teníamos desde el principio: que nos amemos unos a otros.
Y este es el amor: que andemos según sus mandamientos. Este es el mandamiento en que han de andar, como han oído desde el principio.
Porque muchos engañadores han salido al mundo, quienes no confiesan que Jesucristo ha venido en la carne. Tal persona es el engañador y el anticristo.
Miren por ustedes mismos para que no pierdan las cosas en que hemos trabajado sino que reciban abundante recompensa.
Todo el que se extravía y no permanece en la doctrina de Cristo no tiene a Dios. El que permanece en la doctrina, este tiene al Padre y también al Hijo.
Si alguien va a ustedes y no lleva esta doctrina, no lo reciban en casa ni le digan: “¡Bienvenido!”.
Porque el que le da la bienvenida participa de sus malas obras.