Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Reyes 10:28-36 verso por verso
Así Jehú erradicó a Baal de Israel.
Con todo eso, Jehú no se apartó de los pecados de Jeroboam hijo de Nabat, quien hizo pecar a Israel. Jehú no se apartó de ir en pos de los becerros de oro que estaban en Betel y en Dan.
Entonces el SEÑOR dijo a Jehú: — Porque has actuado bien haciendo lo recto ante mis ojos y has hecho a la casa de Acab conforme a todo lo que estaba en mi corazón, tus hijos se sentarán en el trono de Israel hasta la cuarta generación.
Pero Jehú no se cuidó de andar con todo su corazón en la ley del SEÑOR Dios de Israel ni se apartó de los pecados de Jeroboam, quien hizo pecar a Israel.
En aquellos días el SEÑOR comenzó a reducir a Israel. Hazael los derrotó en todo el territorio de Israel,
desde el Jordán al oriente, en todas las tierras de Galaad, Gad, Rubén y Manasés; y desde Aroer, que está junto al río Arnón, hasta Galaad y Basán.
Los demás hechos de Jehú, todas las cosas que hizo y todo su poderío, ¿no están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Israel?
Jehú reposó con sus padres, y lo sepultaron en Samaria. Y su hijo Joacaz reinó en su lugar.
El tiempo que reinó Jehú sobre Israel en Samaria fue de veintiocho años.