Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Reyes 21:2-7 verso por verso
Él hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, conforme a las prácticas abominables de las naciones que el SEÑOR había echado de delante de los hijos de Israel.
Volvió a edificar los lugares altos que su padre Ezequías había destruido. Erigió altares a Baal e hizo un árbol ritual de Asera, como había hecho Acab, rey de Israel. Se postró ante todo el ejército de los cielos y les rindió culto.
También edificó altares en la casa del SEÑOR, de la cual el SEÑOR había dicho: “En Jerusalén pondré mi nombre”.
Edificó altares a todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa del SEÑOR.
Hizo pasar por fuego a su hijo, practicó la magia y la adivinación, evocó a los muertos y practicó el espiritismo. Abundó en hacer lo malo ante los ojos del SEÑOR, provocándolo a ira.
Puso la imagen tallada de Asera que había hecho, en la casa de la cual el SEÑOR había dicho a David y a su hijo Salomón: “En esta casa y en Jerusalén, que he elegido entre todas las tribus de Israel, pondré mi nombre para siempre.