Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Samuel 15:1-10 verso por verso
Aconteció después de esto que Absalón consiguió un carro, caballos y cincuenta hombres que corrieran delante de él.
Absalón se levantaba muy de mañana y se ponía de pie a un lado del camino que conduce a la puerta de la ciudad, y a todo el que tenía pleito e iba a juicio ante el rey, Absalón lo llamaba y preguntaba: — ¿De qué ciudad eres? Él respondía: — Tu siervo es de una de las tribus de Israel…
Entonces Absalón le decía: — Mira, tu causa es buena y justa. Pero no tienes quién te oiga de parte del rey.
— Y añadía Absalón — : ¡Quién me pusiera por juez en el país, para que viniera a mí todo el que tuviera pleito o causa, y yo le haría justicia!
Sucedía que cuando alguno se acercaba para postrarse ante él, este extendía su mano, lo asía y lo besaba.
De esta manera hacía Absalón con todos los israelitas que iban al rey para juicio. Así robaba Absalón el corazón de los hombres de Israel.
Aconteció que después de cuatro añosAbsalón dijo al rey: — Permíteme ir a Hebrón a cumplir mi voto que hice al SEÑOR.
Porque tu siervo hizo un voto cuando estaba en Gesur, en Siria, diciendo: “Si el SEÑOR me hace volver a Jerusalén, yo serviré al SEÑOR”.
El rey le dijo: — Ve en paz. Entonces él se levantó y se fue a Hebrón.
Pero envió espías por todas las tribus de Israel, diciendo: “Cuando escuchen el sonido de la corneta, dirán: ‘¡Absalón reina en Hebrón!’”.