Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Samuel 18:7-11 verso por verso
Allí cayó el pueblo de Israel ante los servidores de David. Aquel día hubo allí una gran matanza de veinte mil hombres.
La batalla se extendió por toda la región y aquel día el bosque devoró más gente que la que había devorado la espada.
Sucedió que Absalón se encontró con los servidores de David. Absalón iba montado sobre un mulo, y el mulo se metió por debajo del espeso ramaje de una gran encina. A Absalón se le enredó la cabeza en la encina, de modo que quedó colgado entre el cielo y la tierra, mientras el mulo que estaba debajo de él siguió adelante.
Un hombre lo vio y avisó a Joab diciendo: — He aquí que he visto a Absalón colgado de una encina.
Joab respondió al hombre que le dio la noticia: — Y viéndolo tú, ¿por qué no lo mataste allí mismo, derribándolo a tierra? Yo te hubiera dado ciento diez gramos de plata y un cinturón.