Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Timoteo 2:1-9 verso por verso
Tú pues, hijo mío, fortalécete en la gracia que es en Cristo Jesús.
Lo que oíste de parte mía mediante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros.
Tú, pues, sé partícipe de los sufrimientos como buen soldado de Cristo Jesús.
Ninguno en campaña militar se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo alistó como soldado.
Además, si algún atleta compite, no es coronado a menos que compita según las reglas.
El labrador que trabaja esforzadamente es quien debe recibir primero su parte de los frutos.
Considera bien lo que digo pues el Señor te dará entendimiento en todo.
Acuérdate de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, de la descendencia de David, conforme a mi evangelio.
Por él soporto sufrimientos hasta prisiones, como si fuera malhechor. ¡Pero la palabra de Dios no está presa!