Explicación, estudio y comentario bíblico de 2 Timoteo 2:6-18 verso por verso
El labrador que trabaja esforzadamente es quien debe recibir primero su parte de los frutos.
Considera bien lo que digo pues el Señor te dará entendimiento en todo.
Acuérdate de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, de la descendencia de David, conforme a mi evangelio.
Por él soporto sufrimientos hasta prisiones, como si fuera malhechor. ¡Pero la palabra de Dios no está presa!
Por tanto, todo lo sufro a favor de los escogidos para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús, con gloria eterna.
Fiel es esta palabra: Si morimos con él, también viviremos con él.
Si perseveramos, también reinaremos con él. Si lo negamos, él también nos negará.
Si somos infieles, él permanece fiel, porque no puede negarse a sí mismo.
Recuérdales esto, requiriéndoles delante de Dios que no contiendan sobre palabras, que para nada aprovecha sino que lleva a la ruina a los que oyen.
Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad.
Pero evita las profanas y vanas palabrerías, porque conducirán más y más a la impiedad.
Y la palabra de ellos carcomerá como gangrena. Entre ellos se cuentan Himeneo y Fileto,
quienes se extraviaron con respecto a la verdad sosteniendo que la resurrección ya ha ocurrido, y trastornaron la fe de algunos.