Explicación, estudio y comentario bíblico de Amós 4:8-9 verso por verso
Acudían dos o tres ciudades a otra ciudad para beber agua y no se saciaban. Pero no se volvieron a mí”, dice el SEÑOR.
“Yo los golpeé con tizón y añublo. La langosta comió sus muchos huertos, sus viñas, sus higueras y sus olivos. Pero no se volvieron a mí”, dice el SEÑOR.