Explicación, estudio y comentario bíblico de Apocalipsis 2:18-66 verso por verso
“Escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: El Hijo de Dios, que tiene sus ojos como llama de fuego y sus pies semejantes al bronce bruñido, dice estas cosas:
Yo conozco tus obras, tu amor, tu fidelidad, tu servicio y tu perseverancia; y que tus últimas obras son mejores que las primeras.
“Sin embargo, tengo contra ti que toleras a la mujer Jezabel, que dice ser profetisa, y enseña y seduce a mis siervos a cometer inmoralidad sexual, y a comer lo sacrificado a los ídolos.
Le he dado tiempo para que se arrepienta, y no quiere arrepentirse de su inmoralidad.
He aquí, yo la echo en cama, y a los que con ella adulteran, en muy grande tribulación, a menos que se arrepientan de las obras de ella.
Y a sus hijos mataré con penosa muerte, y todas las iglesias sabrán que yo soy el que escudriño la mente y el corazón. Y les daré a cada uno de ustedes conforme a sus obras.
“Pero a los demás en Tiatira, a cuantos no tienen esta doctrina, quienes no han conocido las cosas profundas de Satanás (como las llaman), les digo: No les impongo ninguna carga más.
Solamente aférrense a lo que tienen, hasta que yo venga.
Al que venza y guarde mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones,
— él las guiará con cetro de hierro; como vaso de alfarero son quebradas —, así como yo también he recibido de mi Padre.
Además, yo le daré la estrella de la mañana.
“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.