Explicación, estudio y comentario bíblico de Apocalipsis 6:5-7 verso por verso
Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente que decía: “¡Ven!”. Y miré y he aquí un caballo negro, y el que estaba montado sobre él tenía una balanza en su mano.
Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: “¡Un kilo de trigo por el salario de un día, y tres kilos de cebada por el salario de un día! Y no hagas ningún daño al vino ni al aceite”.
Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente que decía: “¡Ven!”.