-
¡Ven conmigo del Líbano! ¡Oh novia mía, ven del Líbano! Desciende de las cumbres del Amana, desde las cumbres del Senir y del Hermón, desde las guaridas de los leones y desde los montes de los leopardos.
-
¡Prendiste mi corazón, oh hermana y novia mía! Prendiste mi corazón con un solo gesto de tus ojos, con una sola cuenta de tus collares.
-
¡Cuán dulces son tus caricias, oh hermana y novia mía! Tus caricias son mejores que el vino. El olor de tus perfumes es superior al de las especias aromáticas.
-
Tus labios destilan miel como panal. Oh novia mía, miel y leche hay debajo de tu lengua. Y la fragancia de tus vestidos es como la fragancia del Líbano.
-
Un jardín cerrado es mi hermana y novia, un jardín cerrado, un manantial sellado.
-
Tus plantas son un huerto de granados con exquisito fruto. Hay alheñas y nardos;
-
nardos, azafrán, cálamo, canela, plantas de incienso, mirra, áloe, con todas las mejores variedades de especias.
-
¡Es un manantial cercado de jardines, un pozo de aguas vivas que corren del Líbano!
Continúa después de la publicidad