Nuestras cartas sois vosotros, escritas en nuestros corazones, conocidas y leídas por todos los hombres;

Nuestra carta - de recomendación.

Escrito en nuestros corazones - no soportado simplemente en las manos. Aunque esta carta viva sea escrita con afecto en mi corazón, deseo que sea leída por todos como mi recomendación. Su conversión a través de mi instrumento, y su fe, "conocida de todos los hombres" por informe ( 1 Corintios 1:4 ), es mi carta de recomendación.

Conocido y leído - Palabras afines en raíz, sonido y sentido (así ). 'Ustedes son conocidos como mis convertidos por el conocimiento general: luego son conocidos de manera más particular, de modo que mi doctrina se lee en su vida'. La escritura primero es "conocida", luego la carta es "leída". No hay un sermón tan poderoso como una vida coherente. El ojo del mundo percibe más que el oído. Las vidas de los cristianos son los únicos libros religiosos que el mundo lee. Ignacio ('ad Ephesum', cap. 10) escribe: 'Denles a los incrédulos la oportunidad de creer a través de ustedes. Considérense empleados por Dios; sus vidas son el lenguaje con el que Él se dirige a ellos. Sean amables cuando ellos estén enojados; humildes cuando ellos sean arrogantes; en respuesta a su blasfemia, oren; ante su incoherencia, manténganse firmes en su fe'.

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