2 Reyes 16:3

Pero él anduvo en el camino de los reyes de Israel, sí, e hizo pasar a su hijo por el fuego, conforme a las abominaciones de las naciones, a las cuales el SEÑOR echó de delante de los hijos de Israel.

Anduvo en el camino de los reyes de Israel. Esto es descriptivo de la primera parte de su reinado, cuando, como los reyes de Israel, patrocinó la adoración simbólica de Dios por medio de imágenes, pero gradualmente fue más allá hacia la idolatría flagrante ( 2 Crónicas 28:2 ).

Hizo pasar a su hijo por el fuego ( 2 Reyes 23:10 ). Las manos del ídolo Moloch, o Baal, al estar al rojo vivo, los niños se pasaban entre ellos, lo que se consideraba una forma de depuración; pero hay razón para creer que en ciertas circunstancias los niños murieron quemados ( Deuteronomio 12:31 ; Salmo 106:37 ; Jeremias 7:31 ; Ezequiel 16:20 ; Ezequiel 23:37 ).

Fue la primera de estas prácticas la que observó Acaz: la de purificar o santificar a sus hijos, dejándolos o "haciéndolos pasar por el fuego", y dedicándolos así a esa divinidad pagana. Era una operación simple y rápida, simplemente colocando al niño entre los brazos incandescentes del ídolo; pero el rito se consideraba simbólico de pureza. Y algo parecido se observa todavía en Persia por el rey de Persia, que envía a su hijo, sentado en un caballo negro, a cabalgar entre las llamas, con el fin de demostrar la sacralidad de su carácter, y mostrar a la multitud que el fuego no le hará daño.

La práctica, sin embargo, de hacer pasar a los niños por el fuego estaba fuertemente prohibida en la ley ( Levítico 18:21 ; Levítico 20:2 ; Deuteronomio 18:10 ), aunque no hay evidencia de que se practicara en Israel hasta el tiempo de Acaz.