Cantares de los Cantares 3:11

Salid, oh hijas de Sión, y ved al rey Salomón con la corona con que le coronó su madre en el día de sus desposamientos, y en el día del gozo de su corazón.

Adelante.

Hijas de Sión. Se cumplirá plenamente en la segunda venida de Cristo. Ya se han dado arras: primero en la Iglesia israelita, luego en la Iglesia cristiana, en cada nueva manifestación de Su gloria y Su amor por Su pueblo.

Corona: nupcial ( Ezequiel 16:8 : los hebreos usaban coronas costosas, o guirnaldas, en las bodas) y real. La corona de espinas fue una vez su coronilla nupcial, Su sangre la copa de vino nupcial. "Su madre" que así lo coronó, es la raza humana, porque Él es "el Hijo del hombre", no simplemente el Hijo de María.

La misma madre se reconcilió con Él, como la Iglesia, sufre dolores de parto por las almas, que le presenta como corona. No avergonzándose de llamar hermanos a los hijos ( Hebreos 2:11 ), llama a la madre de ellos su madre.

He aquí.

Día de sus esponsales, principalmente el matrimonio final, cuando el número de los elegidos será completo.

Alegría. Moody Stuart observa en cuanto a este Cántico ( Cantares de los Cantares 3:6 ; Cantares de los Cantares 4:1 ;), el centro del libro, estas peculiaridades:

(1) El Novio toma la parte principal, mientras que en otros lugares la Novia es el orador principal;

(2) En otros lugares Él es "Rey" o "Salomón", aquí se le llama dos veces "rey Salomón". La novia es aquí seis veces llamada "esposa", nunca antes o después; también "hermana" cuatro veces; y, excepto en el primer verso del Cántico siguiente, en ningún otro lugar;

(3) Él y ella nunca están separados: ninguna ausencia, ninguna queja, que tanto abundan en otros lugares, ocurre en este Cántico.