Ezequiel 26:7

Porque así dice el Señor DIOS; He aquí, traeré sobre Tiro a Nabucodonosor rey de Babilonia, rey de reyes, del norte, con caballos, carros, gente de a caballo, compañías y mucho pueblo.

Traeré sobre Tiro a Nabucodonosor... un rey de reyes, del norte, la localidad original de los caldeos; también la dirección por la que entraron en Palestina, tomando la ruta de Ribla y Hamath en el Orontes, en preferencia a la que cruzaba el desierto entre Babilonia y Judea.

Un rey de reyes, llamado así por los muchos reyes que le tenían lealtad. Dios le había delegado el imperio universal de la tierra, que es suyo como "Señor de reyes". El Hijo de Dios es el único que tiene el derecho y el título inherentemente, siendo no simplemente "un rey de reyes", como lo fue Nabucodonosor, sino "el Rey de reyes".

"Él asumirá el reino cuando los reyes del mundo hayan sido completamente probados como abusadores de la confianza ( Apocalipsis 17:12 ; Apocalipsis 19:15 ).

La profecía de Ezequiel no se basó en conjeturas del pasado, porque Salmanasar, con todo el poderío del imperio asirio, había fracasado en el sitio de Tiro. Sin embargo, Nabucodonosor iba a tener éxito. Josefo nos dice que Nabucodonosor comenzó el sitio en el séptimo año del reinado de Itobal, rey de Tiro.