Y traeré un bocado de pan, y consolaré vuestros corazones; después de eso pasaréis; porque para esto habéis venido a vuestro siervo. Y ellos dijeron: Haz así, como has dicho.

Por eso habéis venido. No se hicieron preguntas. Pero Abrahám conoció su objetivo por el camino que tomaron: acercarse directamente a la tienda del jeque principal, que siempre se distingue del resto, y mostrar así su deseo de ser sus invitados. Las tiendas de una tribu nómada se montan a veces en línea recta, pero con más frecuencia en forma semicircular, para dejar un espacio abierto en el centro para guardar el equipaje y el ganado pequeño durante la noche.

Los árabes llaman a la tienda "Beit-sha'ar", o "la casa de pelo", ya que consiste en una cubierta de tela de pelo de cabra, ya sea negra,beige o marrón oscura, tejida por las mujeres. El trozo de tela utilizado para este fin suele tener unas cincuenta yardas de largo y de diez a veinte de ancho; y estando dividido en tres porciones de igual longitud, se extiende sobre altos palos clavados perpendicularmente en el suelo, de modo que se forman dos compartimentos interiores por cada uno de los extremos que caen al suelo, a los que se sujetan con clavijas de tienda. Los lados opuestos se cierran de la misma manera. Un espacio abierto, formado por una parte de uno de los lados que cuelga suelta y sin sujetar al suelo, se deja delante para la puerta o la entrada. La división interior o encerrada; el harén, destinado a la esposa y la familia, es accesible a través del tabique de tela o desde una abertura en la parte posterior; mientras que en el espacio abierto de la tienda el anfitrión disfruta de un fresco refugio en el calor del día y recibe a sus invitados.

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