Hechos 8:39

Y cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe, de modo que el eunuco no lo vio más, y siguió su camino gozoso.

Y cuando salieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe. Negar el carácter sobrenatural de esta remoción de Felipe (como hacen Olshausen, Meyer, Bloomfield, Hackett y otros) es en vano. Resalta en las expresiones "arrebatado" [ harpasen ( G726 )], "no lo vi más" [ eiden ( G1492 ) auton ( G846 ) ouketi ( G3765 )], "fue encontrado" [ heurethee ( G2147 ) )]. De hecho, al comparar lo que se dice aquí del eunuco con lo que leemos de Elías ( 1 Reyes 18:12 ; 2 Reyes 2:16 ),se verá que es solo una repetición del método del Señor con los antiguos profetas en ocasiones importantes. (Así lo señalan Bengel, Alford, Lechler y la gran mayoría de intérpretes). La palabra "arrebatar" [ harpazoo ( G726 )], sse utiliza (como señala Bengel) para expresar una remoción igualmente sobrenatural en 2 Corintios 12:2 y 1 Tesalonicenses 4:17 .

Y siguió su camino gozoso. Había encontrado a Cristo y la clave de las Escrituras; su alma estaba liberada y su discipulado sellado; había perdido a su maestro, pero había ganado algo infinitamente mejor; se sentía como un hombre nuevo y "su alegría era completa". La tradición dice que fue el primer predicador del Evangelio en Etiopía; y, de hecho, ¿cómo podría evitar contar lo que el Señor había hecho por su alma? Sin embargo, no hay certeza acerca de alguna conexión histórica entre sus labores y la introducción del cristianismo en ese país.