Miqueas de Morasteo profetizó en días de Ezequías rey de Judá, y habló a todo el pueblo de Judá, diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos; Sion será arada como un campo, y Jerusalén se convertirá en montones de ruinas, y el monte de la casa como las alturas de un bosque.

Miqueas -

Morastita - llamado así de un pueblo de la tribu de Judá.

Ezequías. El precedente en el reinado de tan buen rey demostró que Jeremías no fue el único profeta, ni el primero, que amenazó la ciudad y el templo sin incurrir en la muerte.

La montaña de la casa como los lugares altos de un bosque - Moriah, sobre la cual estaba el templo (peculiarmente llamado "la casa"), se cubrirá con maderas en lugar de edificios. Jeremías, al citar profecías anteriores, nunca lo hace sin alteración; él adapta el lenguaje a su propio estilo, mostrando así su autoridad en su tratamiento de las Escrituras, como siendo él mismo inspirado.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad