Por tanto, no os oprimiréis unos a otros; mas temerás a tu Dios, porque yo soy Jehová tu Dios.

No os oprimiréis unos a otros. Esto, que es lo mismo que ( Levítico 25:14 ), se refería a la venta o compra de posesiones, y al deber de prestar una atención honesta y equitativa, por ambas partes, al período limitado durante el cual podía mantenerse el trato. El objetivo del legislador era, en la medida de lo posible, mantener el orden original de las familias y la igualdad de condiciones entre el pueblo.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad