El cual sin tener guía, ni capataz ni gobernante,

Que no tiene guía, supervisor o gobernante, es decir, sin líder de ningún tipo; mientras que las abejas y las grullas sí. Es tanto más maravilloso que las hormigas tengan tal orden en ausencia de una cabeza. Por tanto, es tanto más inexcusable que los hombres, que tienen tantos que los impulsan a trabajar; padres, preceptores, el ejemplo de los buenos efectos de la energía y los malos efectos de la indolencia, sean alguna vez perezosos. La ociosidad es contra la naturaleza. Los guías, supervisores y gobernantes no deben permitir que ninguno de sus subordinados sea indolente.

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