Salmo 48:2

Hermosa por su situación, el gozo de toda la tierra, es el monte de Sion, a los lados del norte, la ciudad del gran Rey.

Hermoso por la situación, más bien, 'en su elevación' х nowp ( H5131 )]. Sólo en la medida en que la altura física es un símbolo de lo espiritual, el salmista la valora. Compare ( Salmo 68:16 ), donde "el monte en el que Dios desea habitar" se prefiere a todos los "collados altos" del paganismo.

Compare ( Isaías 2:2 ; Ezequiel 40:2 ), donde el ideal "monte muy alto (en la tierra de Israel), con el marco de una ciudad al sur", se contempla en visión ( Apocalipsis 21:10 ; monte alto (en la tierra de Israel) , con el marco de una ciudad al sur", se contempla en visión ( Apocalipsis 21:10 ; Mateo 5:14 ).

La alegría de toda la tierra. ( Lamentaciones 2:15 ) se refiere a este salmo. A los ojos de los espirituales, así se considera a Jerusalén, por sus preciosas y sagradas asociaciones, en las que se interesa toda la tierra ( Ezequiel 16:15 ). Compare en cuanto a la futura gloria y permanencia de Jerusalén, ( Isaías 33:20 ) .

Es el monte de Sión, a los lados del norte. 'No habla como geógrafo, sino como teólogo' (Hengstenberg). "Los lados del norte" significan literalmente los recesos internos y más lejanos, donde ambos "lados" se encuentran; así los huecos más alejados a los lados del monte Moriah, sobre el cual se construyó el templo, al norte del monte Sión ( Isaías 14:13 , nota).

La ciudad se construyó, en su mayor parte, en estas hondonadas y laderas. La ciudad alta, Sión, estaba al norte de Sión estrictamente así llamada; la ciudad baja, Acra, estaba al norte de ésta y de Moriah. Tú todas las partes "de la ciudad del gran Rey", tanto el sur como el norte, son "el gozo de toda la tierra". Las partes del norte de la ciudad, aunque de menor altura que Sión, se distinguían por sus altas torres y fortificaciones.

Pero Hengstenberg toma "los lados del norte" en oposición al "Monte Sion", Sion, el verdadero asiento de la Deidad. Los paganos pensaban que 'el extremo norte' era el asiento donde los dioses celebraban su asamblea, la montaña de los dioses ( Isaías 14:13 , notas). 'Lo que el pagano soñó, ese monte de Sion era en realidad, su base en la tierra, su cima en el cielo.

El extremo norte contrasta con las montañas de Israel' ( Ezequiel 38:6 ; Ezequiel 38:15 ; Ezequiel 39:2 ). El contraste de "el gran Rey" con "los reyes" de la tierra ( Salmo 48:4 ) favorece este contraste similar de su asiento en Jerusalén con el asiento imaginario de los dioses paganos en el extremo norte.