1 Crónicas 9:1-44
1 Todo Israel fue registrado según las genealogías. He aquí que están inscritos en el libro de los reyes de Israel.
2 Los primeros que volvieron a habitar en sus propiedades, en sus ciudades, fueron los israelitas, los sacerdotes, los levitas y los servidores del templo.
3 En Jerusalén se establecieron algunos de los hijos de Judá, de los hijos de Benjamín, y de los hijos de Efraín y de Manasés:
4 Utai hijo de Amihud, hijo de Omri, hijo de Imri, hijo de Bani, de los hijos de Fares, hijo de Judá.
5 De los silonitas, Asaías el primogénito y sus hijos.
6 De los hijos de Zéraj, Jeuel y sus hermanos; fueron seiscientos noventa.
7 De los hijos de Benjamín: Salú hijo de Mesulam, hijo de Hodavías, hijo de Hasenúa;
8 Ibneías hijo de Jerojam; Ela hijo de Uzi, hijo de Micri; Mesulam hijo de Sefatías, hijo de Reuel, hijo de Ibnías;
9 y sus hermanos, según sus generaciones; fueron novecientos cincuenta y seis. Todos estos hombres fueron jefes de familia en sus casas paternas.
10 De los sacerdotes: Jedaías, Joyarib, Jaquín;
11 Azarías hijo de Hilquías, hijo de Mesulam, hijo de Sadoc, hijo de Merayot, hijo de Ajitob, principal de la casa de Dios;
12 Adaías hijo de Jerojam, hijo de Pasjur, hijo de Malquías; Masai hijo de Adiel, hijo de Jazera, hijo de Mesulam, hijo de Mesilemit, hijo de Imer;
13 y sus hermanos, jefes de sus casas paternas; fueron mil setecientos sesenta, hombres de valor para la obra del servicio de la casa de Dios.
14 De los levitas: Semaías hijo de Hasub, hijo de Azricam, hijo de Hasabías, de los hijos de Merari;
15 Bacbacar, Heres, Galal; Matanías hijo de Micaías, hijo de Zicri, hijo de Asaf;
16 Abdías hijo de Semaías, hijo de Galal, hijo de Jedutún; Berequías hijo de Asa, hijo de Elcana, el cual habitó en las aldeas de los netofatitas.
17 Y los porteros fueron: Salum, Acub, Talmón, Ajimán y sus hermanos. Salum era el jefe.
18 Hasta ahora están estos porteros de los campamentos de los hijos de Leví en la puerta del rey, que está al este.
19 Salum hijo de Coré, hijo de Ebiasaf, hijo de Coré; y sus hermanos los coreítas, de su casa paterna, estuvieron a cargo de la obra del servicio, guardando las puertas del tabernáculo, así como sus padres guardaron la entrada del campamento del SEÑOR.
20 Fineas hijo de Eleazar fue previamente el principal de ellos, y el SEÑOR estaba con él.
21 Zacarías hijo de Meselemías era portero a la entrada del tabernáculo de reunión.
22 Todos estos escogidos para ser guardias de las puertas eran doscientos doce cuando fueron contados en sus aldeas, según sus registros genealógicos. A ellos los instalaron en sus funciones David y Samuel el vidente.
23 Así ellos y sus hijos fueron porteros por turno en la casa del SEÑOR, es decir, en la casa del tabernáculo.
24 Los porteros estaban en los cuatro puntos cardinales: en el este, en el oeste, en el norte y en el sur.
25 Sus hermanos que estaban en sus aldeas venían de tiempo en tiempo, para estar con estos durante siete días.
26 Pero los cuatro jefes de los porteros, que eran levitas, estaban en puestos de confianza, a cargo de las cámaras y de los tesoros de la casa de Dios.
27 Estos pasaban la noche alrededor de la casa de Dios, porque estaban encargados de guardarla y de abrirla cada mañana.
28 Algunos de ellos estaban encargados de los utensilios para el culto, los cuales eran contados cuando los guardaban y contados cuando los sacaban.
29 Otros habían sido encargados de los utensilios, de todos los utensilios del santuario, de la harina, del vino, del aceite, del incienso y de las especias aromáticas.
30 Algunos de los hijos de los sacerdotes preparaban la mezcla de las especias aromáticas.
31 Matatías, uno de los levitas, primogénito de Salum el coreíta, estaba encargado de las cosas que se preparaban en la sartén.
32 Algunos de los hijos de Cohat y de sus hermanos estaban encargados del pan de la presentación, el cual ponían en orden cada sábado.
33 Y los que eran cantores, jefes de casas paternas de los levitas, estaban en las cámaras, exentos de otros servicios; porque de día y de noche estaban en este quehacer.
34 Estos eran jefes de casas paternas de los levitas, según sus generaciones. Estos jefes habitaban en Jerusalén.
35 En Gabaón habitaba Jeiel, padre de Gabaón. El nombre de su mujer era Maaca.
36 Su hijo primogénito fue Abdón; luego nacieron Zur, Quis, Baal, Ner, Nadab,
37 Gedor, Ajío, Zacarías y Miclot.
38 Miclot engendró a Simeam. Ellos también habitaban en Jerusalén con sus hermanos, frente a ellos.
39 Ner engendró a Quis, y Quis engendró a Saúl. Saúl engendró a Jonatán, a Malquisúa, a Abinadab y a Es-baal.
40 Merib-baal fue hijo de Jonatán. Y Merib-baal engendró a Micaías.
41 Los hijos de Micaías fueron: Pitón, Melec, Tarea y Acaz.
42 Acaz engendró a Joada; Joada engendró a Alémet, a Azmávet y a Zimri. Zimri engendró a Mosa;
43 Mosa engendró a Bina, cuyo hijo fue Refaías, cuyo hijo fue Elasa, cuyo hijo fue Azel.
44 Los hijos de Azel fueron seis, cuyos nombres son: Azricam, Bocru, Ismael, Searías, Abdías y Hanán. Estos fueron los hijos de Azel.
REGISTROS ORIGINALES DE LAS GENEALOGIAS DE ISRAEL Y JUDA.
1. Contado todo Israel por el orden de los linajes—Desde el principio de la nación hebrea se llevaba archivo público, que contenía un registro del nombre de cada persona, y también de la tribu y familia a que pertenecía. “El libro de los reyes de Israel y Judá”, no se refiere a los dos libros canónicos que se conocen en las Escrituras por aquel nombre, sino a copias auténticas de aquellos registros, colocados bajo el cuidado oficial de los soberanos; y como gran número de israelitas (v. 3) se refugiaron en Judá durante la invasión de Salmanasar, llevaron consigo los registros públicos. Las genealogías dadas en los capítulos anteriores fueron sacadas de los registros públicos tanto de Israel como de Judá; y las dadas en este capítulo se refieren al período subsiguiente a la restauración; de donde aparece (cf. cap. 3:17-24) que los registros genealógicos fueron guardados durante el cautiverio en Babilonia. Estas tablas genealógicas, pues, son de la más alta autoridad por lo verdadero y correcto, siendo tomada la primera porción de los registros auténticos de la nación; y en cuanto a los que pertenecen al tiempo del cautiverio, fueron confeccionados por un escritor contemporáneo, quien, además de tener acceso a los mejores manantiales de información, y siendo de la más estricta integridad personal, fué guiado y preservado de todo error por la divina inspiración.
2. Los primeros moradores que entraron en sus posesiones—Este capítulo trata enteramente de los primeros exiliados que regresaron. Casi todos los nombres se repiten en Nehemías cap. 11, aunque hay diferencias que se explicarán allí. La misma división del pueblo en cuatro clases, fué continuada después del cautiverio como antes; es decir, los sacerdotes, levitas, nacionales que ahora se llaman por el nombre común de israelitas y los nethineos (Josué 9:27; Esdras 2:47; Esdras 8:20). Cuando el historiador habla de “los primeros moradores que entraron en sus posesiones”, da a entender que había otros que más tarde volvieron y se radicaron en posesiones no ocupadas por los primeros. En efecto, leemos de grandes números que regresaron sucesivamente bajo Esdras y Nehemías en una fecha posterior. Y algunos de los que volvían a la antigua herencia de sus padres, habían vivido en Palestina antes del tiempo del cautiverio. (Esdras 3:12; Hageo 2:4, Hageo 2:10).
18. la puerta del rey—El rey tenía una puerta desde su palacio al templo (2 Reyes 16:18), que sin duda estaba constantemente cerrada, excepto para el uso del monarca; y aunque no había rey en Jerusalem al regreso del cautiverio, sin embargo, el viejo ceremonial era continuado, probablemente con la esperanza de que pronto sería restaurado el cetro a la casa de David. Es un honor por el cual los reyes orientales son distinguidos, el tener una puerta dedicada exclusivamente a su uso especial, y que permanece cerrada, excepto cuando él entra o sale (Ezequiel 44:2). No habiendo rey entonces en Israel, esta puerta debe haber estado siempre cerrada.