SALMO CXLVII. (LAUDA JERUSALÉN.)

La Iglesia está llamada a alabar a Dios por sus gracias y favores peculiares a su pueblo. En hebreo, este salmo se une al anterior.

o Salmo hebreo cxlvii. Ver. 20. Ellos. No les ha anunciado sus decretos. Esta gloria estaba reservada para Israel, Deuteronomio iv. 7. (Calmet) --- La ley escrita le fue otorgada a este último. Sin embargo, Dios había manifestado suficientemente su voluntad a toda la humanidad, de modo que ellos también debían comparecer ante su tribunal. (San Crisóstomo) (Berthier) --- Aleluya. Considerando que todos estaban en la masa del pecado, y que Dios justamente permitió que muchos perecieran; aquellos a quienes justifica están más obligados a alabarlo; y por eso el profeta concluye este y los siguientes salmos con Aleluya.

(Worthington) --- Los cristianos, y en particular los católicos, son los más preocupados, ya que muchos se han rebelado contra la luz de la fe, (Berthier) y abusan del don de las Sagradas Escrituras. (Haydock)

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