Y sucedió que mientras hablaba con él, el rey le dijo: ¿Has sido hecho por el consejo del rey? literalmente, "¿Te hemos hecho consejero del rey?" Aquel que en otro momento hubiera acogido con agrado el consejo del siervo de Jehová, ahora estaba tan engreído por; su reciente éxito que le molestaba toda forma de interferencia. Abstenerse; ¿Por qué has de ser herido? Estaba tan perdido en su ceguera que amenazó con dañar al profeta de Jehová si persistía en su consejo.

Entonces el profeta se abstuvo y dijo: Sé que Dios ha resuelto destruirte porque has hecho esto y no has escuchado mi consejo. Dado que Amasías endureció voluntariamente su corazón y cegó sus ojos, el Señor usaría este estado mental para su propia destrucción, castigándolo con sus propios pecados.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad