Mateo 2:20

diciendo: Levántate, toma al niño ya su madre, y vete a la tierra de Israel; porque han muerto los que buscaban la vida del niño.

Herodes murió en Jericó en el año 750 después de la fundación de Roma. Y su hijo Antípater, heredero aparente del trono, que había heredado el carácter cruel de su padre, había sido ejecutado por orden del tirano, cinco días antes de que él mismo entregara su alma. De modo que aquellos cuyos designios asesinos eran más evidentes ya no vivían. Por tanto, el ángel le dio a José la orden de regresar a la tierra de Israel.

Ningún peligro inmediato amenazaba la vida del Salvador. No es necesario sentir aprensión con respecto a Su seguridad. No hay nada, ninguna persona a la que temer: ¡Vete! Note nuevamente que Mateo siempre le da al niño Jesús la posición prominente a la que Su divinidad le da derecho. Debe mantenerse en primer lugar en la mente y el corazón de todos los lectores.