Judá aboga por Benjamín

Génesis 44:18

Ninguna porción de Génesis podría ser más adecuada para el Viernes Santo. La propuesta de Judá de entregarse a sí mismo en lugar de Benjamín nos recuerda a Aquel que se entregó libremente por todos nosotros. Con tanto amor, pero de infinita intensidad, Cristo nos amó. En las palabras de Judá, encontramos el tipo más elevado de súplica que el hombre haya hecho jamás en favor del hombre. ¡Es extraordinario vislumbrar las fuertes y nobles emociones que duermen en los corazones donde menos deberíamos esperarlas! Pero estas palabras son pobres y frías comparadas con las que Jesús pronuncia en nuestro nombre.

Debe haber requerido un dominio propio extraordinario por parte de José para hacer sufrir así a sus hermanos. Pero se atrevió a hacer cumplir, porque sabía la meta a la que se acercaban. Cristo a menudo se aparta para ocultar su dolor por nuestros dolores, que son el camino necesario hacia donde se enjugan todas las lágrimas.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad