Jueces 8:29-35

"A través de la matanza a un trono"

Jueces 8:29 ; Jueces 9:1

Los Hijos de Israel eran culpables de gran inconstancia e inestabilidad. Pronto volvieron a adorar a Baal y se olvidaron de mostrar bondad a la familia de su gran líder. Pero tal es la fragilidad del corazón humano. Por muy calientes que estemos hoy por Cristo, mañana puede que seamos fríos y distantes. Parece como si el gran adversario se burlara de nosotros con esto como lo hizo con John Bunyan, a quien no dejaba de susurrar.

"Te enfriaré, te enfriaré". Debemos llevar nuestros corazones inconstantes a nuestro Señor, pidiéndole que nos mantenga fieles y ardientes en nuestro amor. Hay momentos en que Su amistad es lo más real de la vida, pero luego la gloria del arco iris se desvanece en el cielo. ¡Ya no sea así, oh Señor, te lo suplicamos!

El terrible crimen de Abimelec fue atenuado por la gente de Siquem, porque su madre era una de ellos. Compare Jueces 8:31 con 9: 1, 18. Pero los molinos de Dios estaban moliendo terribles problemas para todos ellos, Jueces 9:56 .

Seguramente, en su falta de autocontrol, Gideon tuvo mucho por lo que responder, Jueces 8:30 ! El mal que hacen los hombres vive después de ellos.