Números 3:1-13
1 Este es el registro de los descendientes de Aarón y de Moisés, el día en que el SEÑOR habló a Moisés en el monte Sinaí:
2 Estos son los nombres de los hijos de Aarón: Nadab el primogénito, Abihú, Eleazar e Itamar.
3 Estos son los nombres de los hijos de Aarón ungidos sacerdotes, a quienes él invistió para servir como sacerdotes.
4 Pero Nadab y Abihú murieron delante del SEÑOR cuando ofrecieron fuego extraño delante del SEÑOR en el desierto de Sinaía, y no tuvieron hijos. Así que Eleazar e Itamar sirvieron como sacerdotes delante de su padre Aarón.
5 El SEÑOR habló a Moisés diciendo:
6 “Haz que se acerque la tribu de Leví y ponla delante del sacerdote Aarón, para que ellos le sirvan.
7 Que guarden delante del tabernáculo de reunión lo que él les ha encomendado y lo que ha sido encomendado a toda la congregación, para llevar a cabo el servicio del tabernáculo.
8 Que cuiden de todos los utensilios del tabernáculo de reunión y lo que ha sido encomendado a los hijos de Israel, para llevar a cabo el servicio del tabernáculo.
9 Darás los levitas a Aarón y a sus hijos. Le son enteramente dedicados de entre los hijos de Israel.
10 Constituirás a Aarón y a sus hijos para que cumplan con su sacerdocio. El extraño que se acerque será muerto”.
11 El SEÑOR habló a Moisés diciendo:
12 “He aquí, yo he tomado a los levitas de entre los hijos de Israel en lugar de todo primogénito que abre la matriz, de entre los hijos de Israel. Los levitas serán míos,
13 porque mío es todo primogénito. El día en que hice morir a todos los primogénitos en la tierra de Egipto, consagré para mí a todos los primogénitos en Israel, así de hombres como de animales. Míos serán. Yo, el SEÑOR”.
44-51, el sustituto del primogénito
Los levitas fueron llevados, en lugar de los primogénitos de Israel, para realizar el servicio del Tabernáculo. Había casi tantos levitas como primogénitos, y la diferencia se compensó con el pago del dinero de redención por parte del excedente, Números 3:45 . ¡Así que cada uno de nosotros ha sido redimido por la sangre del Cordero para pertenecer a Dios y ministrarle! La familia de Aarón proporcionó el sacerdocio, Levítico 3:9 . El resto de la tribu realizaba los deberes más fastidiosos del ministerio y el transporte.
Los gersonitas, como mayores, se inclinaron hacia el oeste del tabernáculo y se ocuparon de las cortinas y las cortinas. Los coatitas, por ser parientes de Aarón, se dirigieron hacia el sur y estaban a cargo de los vasos sagrados. Los meraritas acamparon hacia el norte y se encargaron de las tablas y basas. A cada uno le bastaba saber que su lugar y su cargo eran designados por Dios. Incluso llevar un alfiler se volvió honorable, cuando Dios se lo había asignado a un hombre como su parte.