La transformación y salvación de un paria (19: 2-10).

En contraste directo con el gobernante rico hay otro hombre de estatus. Es un funcionario público en jefe. Pero a diferencia del gobernante rico, sus ojos se abren y con gusto da gran parte de su riqueza a los pobres, y corrige todo el mal que ha hecho. En el quiasmo de la Sección se asemeja al mayordomo que usó sabiamente la riqueza de su señor y, siguiendo los pensamientos sobre el uso sabio del dinero en preparación para el futuro eterno en las moradas eternas ( Lucas 16:1 ), él mismo sigue el mismo patrón. .

Análisis.

a He aquí un hombre llamado Zaqueo, y era un funcionario público en jefe ( Lucas 19:2 a).

b Y era rico ( Lucas 19:2 b).

c Intentó ver a Jesús quien era, y no pudo por la multitud, porque era bajo de estatura ( Lucas 19:3 ).

d Corrió antes y se subió a un sicomoro para verlo, porque debía pasar por ese camino ( Lucas 19:4 ).

e Cuando Jesús llegó al lugar, miró hacia arriba y le dijo: “Zaqueo, date prisa y baja, porque hoy tengo que quedarme en tu casa” ( Lucas 19:5 ).

d Se apresuró, bajó y lo recibió con alegría ( Lucas 19:6 ).

c Cuando lo vieron, todos murmuraron, diciendo: “Ha entrado a hospedarse con un hombre pecador” ( Lucas 19:7 ).

b Zaqueo se puso de pie y dijo al Señor: “He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres, y si he exigido injustamente a alguien, se lo devuelvo cuadruplicado” ( Lucas 19:8 ).

a Jesús le dijo: “Hoy ha venido la salvación a esta casa, por cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del Hombre vino a buscar ya salvar lo que estaba perdido ”( Lucas 19:9 ).

Note cómo en 'a' Zaqueo era un funcionario público en jefe, un hombre totalmente sin escrúpulos, un paria, y en paralelo se ha convertido en un 'hijo de Abraham', uno que es aceptado, porque el perdido ha sido salvo. En 'b' era muy rico, y en paralelo dispone de grandes cantidades de sus riquezas a los pobres. En 'c' era bajo de estatura, y en el paralelo era un pecador (corto en justicia). En 'd' corrió y trepó al árbol, y en el paralelo corrió y bajó. Y, en el centro, Jesús vino para quedarse con él.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad