Los dos destinos (7: 24-27).

Habiendo dado su firme advertencia, Jesús vuelve ahora a la idea de las dos opciones que están abiertas ante ellos, pero esta vez en términos de dos casas construidas sobre dos "cimientos". Sin embargo, no son los cimientos en los que se hace hincapié, sino los destinos. Todos deben decidir ahora cómo responderán a sus palabras, y de ello dependerá su futuro eterno. Aquellos que escuchan Sus palabras y las hacen se encontrarán edificados sobre un fundamento que les asegura que estarán seguros por la eternidad, de modo que cuando llegue el juicio, se mantendrán firmes. Pero aquellos que escuchan sus palabras y no las hacen, encontrarán ese día que todo se derrumba a su alrededor. No tienen fundamento.

Análisis.

Jesús termina con dos posiciones perfectamente equilibradas y contrastantes. No tienen la forma de un quiasmo, sino de dos paralelos directos, que coinciden frase por frase, cada uno de los cuales es, sin embargo, un quiasmo. Los hemos dividido para que el paralelismo se pueda observar con bastante claridad.

a A Todo el que oye estas palabras mías y las pone en práctica,

b B Será comparado con un hombre sabio, que construyó su casa sobre la roca,

c C Y descendió lluvia, y vinieron ríos,

c D Y los vientos soplaron y golpearon esa casa,

b E Y no cayó,

a F Porque fue fundada sobre la roca.

a A Y todo el que oye estas palabras mías y no las pone en práctica,

b B Será comparado con un hombre necio, que construyó su casa sobre la arena,

c C Y descendió lluvia, y vinieron ríos,

c D Y soplaron los vientos, y golpearon esa casa,

b E Y cayó,

a F Y grande fue su caída.

Observe que en cada caso en 'a' se nos dice cómo respondieron, y en paralelo la consecuencia final. En 'b' se nos dice la base sobre la que se construyó cada uno y en paralelo cuál fue la consecuencia. En el centro de 'cy su paralelo están las descripciones de las actividades de Dios.

Note cuidadosamente los contrastes.

Uno hace Sus palabras, el otro no.

Uno es sabio, el otro es tonto.

Uno construido sobre roca, el otro sobre arena.

Una casa fue 'golpeada' (tribulación / examen estricto), la otra fue 'golpeada' (juicio final).

Uno no cayó (se mantuvo firme), el otro cayó (se derrumbó).

Uno fue fundado sobre roca, el otro colapsó violentamente.

Aparte de la última, cada declaración tiene su contraparte y esperamos que la última termine, "porque fue fundada sobre la arena", pero no es así. Porque Él está resaltando el hecho de que no tenía fundamento. Cuando llegó la prueba, no había nada allí. Jesús los deja así con el pensamiento flotando en el aire, 'y grande fue su caída'. Ese es el pensamiento final que Él quiere que todos se lleven consigo.

Así que el Sermón que comienza con las palabras 'Benditos por Dios son los pobres de espíritu, porque a ellos les pertenece la Regla Real del Cielo', termina con (hablando de aquellos que han dado la espalda a la Regla Real del Cielo y han construido sobre 'falsos profetas' de cualquier tipo) 'grande fue su caída'.

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