Santiago 1:4
El perfecto trabajo de la paciencia.
I. Todos podemos alcanzar un cierto grado de competencia en la
mayoría de las cosas que intentamos; pero son pocos los que tienen
paciencia para llegar a la perfección. En la vida de casi todos ha
habido en algún momento un intento de hacer el bien... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:12
La tentación tratada como una oportunidad.
I. La Biblia nos enseña, y como cristianos creemos, que hay un curso
regular de tentaciones para nosotros en esta vida; que hay una serie
de objetos y deseos que se nos presentan constantemente en el curso
natural de las cosas aquí a los que... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:17
La uniformidad de la naturaleza.
I. La uniformidad de la naturaleza reprende la timidez del hombre.
Cuando estamos abrumados por muchos duelos, ¿debería ser motivo de
queja para nosotros que la naturaleza, que tal vez ha causado nuestra
angustia pasajera, parezca tratarnos con total... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:18
Las primicias de las criaturas de Dios.
I. "Por su propia voluntad", o porque Él lo quiso, se da como la
razón por la que Dios nos otorgó una nueva vida. Debemos recibir
esta seguridad con el esfuerzo de sacar provecho de ella y obtener un
bien práctico de ella, no con vana especulaci... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:19
El temperamento judicial.
Este es uno de los dichos más sabios y difíciles de las Sagradas
Escrituras. Se recomienda a nuestro buen sentido y, sin embargo, es
uno de los más difíciles de observar, porque en una línea se nos
pide que seamos rápidos y lentos. Algunos preceptos cristian... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:22
El peligro de confundir el conocimiento con la obediencia.
I. El conocimiento sin obediencia termina en nada. Es, como dice St.
James, como un hombre que mira su propio rostro en un espejo. Durante
un tiempo tiene la percepción más clara de su propio rostro; cada
línea y rasgo, inclu... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:25
La ley perfecta y sus hacedores.
I. La Ley Perfecta. Permítanme recordarles cómo, en cada revelación
de la verdad divina contenida en el Evangelio, hay una influencia
moral y práctica directa. No se nos da ninguna palabra del Nuevo
Testamento para que conozcamos la verdad, sino todo... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:26
El freno de la lengua.
Considere la gran clase de pecados a los que una lengua desenfrenada
nos hace responsables.
I. Uno de los usos más comunes de la lengua humana es el de mentir, y
los mentirosos se encuentran entre aquellos a quienes está
especialmente reservada la negrura de l... [ Seguir leyendo ]
Santiago 1:27
El servicio cristiano de Dios.
I. El significado general y la intención de este pasaje son obvios.
Sin duda, algunos de estos primeros conversos del judaísmo, a quienes
se dirige la Epístola de Santiago, encontraron muy difícil,
entrenados como habían sido en el mero formalismo exter... [ Seguir leyendo ]