Sin embargo, cuando se llevará usted , para entregaros, no os preocupéis por lo que habéis de decir, ni lo penséis, sino lo que os fuere dado en aquella hora, eso hablad; porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu Santo.

Ver. 11. Ni premeditais ] No habéis contestado, como los muchachos hacen sus oraciones y ejercicios escolares, que los griegos llaman μελετας, a lo que Beza piensa que aquí alude nuestro Salvador.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad