Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo:

Ver. 24. El reino de los cielos ] a saber. aquí en la tierra. Porque ya tenemos la vida eterna, 1. In pretio, 2. Promisso, 3. Primitiis, en el precio, promesa, primicias. Así como Dios preparó el paraíso para Adán, también tiene el cielo para él. Sin embargo, no se reserva todo para el más allá; pero da una uva de Canaán en este desierto, donde por la justicia, la paz y el gozo en el Espíritu Santo, el pueblo de Dios incluso come, bebe y duerme la vida eterna, como se dijo una vez de un reverendo divino de Escocia.

El que sembró buena semilla en su campo ] Entre los romanos era, probrum censorium agrum male colere, falta castigable por los censores, ser un mal sembrador, Plin. lib. 18. Y cuando elogiaban mucho a alguno, decían: "Es un hombre honesto y un buen labrador". a

a Maiores nostri siquem laudabant, ita laudabant, virum bonum, bonumque colonum. Varro.

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