17-25 Moisés se encarga de guardar los mandamientos de Dios. La negligencia nos arruinará; pero no podemos ser salvos sin diligencia. Es nuestro interés, así como nuestro deber, ser religiosos. Será nuestra vida. La piedad tiene la promesa de la continuidad y la comodidad de la vida que es ahora, en lo que respecta a la gloria de Dios. Será nuestra justicia. Es solo a través del Mediador que podemos ser justos ante Dios. El conocimiento de la espiritualidad y la excelencia de la santa ley de Dios, es adecuado para mostrar al hombre pecador su necesidad de un Salvador, y para preparar su corazón para recibir una salvación gratuita. El evangelio honra la ley, no solo en la perfecta obediencia del Hijo de Dios, el Señor Jesucristo; pero en eso es un plan para traer de vuelta a los rebeldes y enemigos apóstatas, por medio del arrepentimiento, la fe, el perdón y la gracia renovadora, amar a Dios sobre todas las cosas, incluso en este mundo; y en el mundo de arriba, amarlo perfectamente, así como los ángeles lo aman.

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