Jesús vuelve a Capernaum y cura a un paralítico. (1-8) Llamado
Mateo. (9) Fiesta de Mateo o de Leví. (10-13) Objeciones de los
discípulos de Juan. (14-17) Cristo resucita a la hija de Jairo, cura
el flujo de sangre. (18-26) Cura a dos ciegos. (27-31) Cristo expulsa
un espíritu mudo. (32-34) Envía a... [ Seguir leyendo ]
1-8 La fe de los amigos del paralítico en traerlo a Cristo fue una fe
fuerte; creían firmemente que Jesucristo podía y lo sanaría. Una fe
fuerte no considera obstáculos para presionar a Cristo. Era una fe
humilde; lo trajeron para asistir a Cristo. Fue una fe activa. El
pecado puede ser perdonado, p... [ Seguir leyendo ]
9 Mateo estaba en su vocación, como el resto de los que Cristo
llamó. Como Satanás viene con sus tentaciones a los ociosos, así
Cristo viene con sus llamadas a los que están empleados. Todos somos
naturalmente reacios a ti, oh Dios; invítanos a seguirte; atráenos
con tu poderosa palabra, y correremo... [ Seguir leyendo ]
10-13 Algún tiempo después de su llamado, Mateo buscó traer a sus
antiguos asociados para escuchar a Cristo. Sabía por experiencia lo
que la gracia de Cristo podía hacer, y no se desesperaría con
respecto a ellos. Aquellos que efectivamente son traídos a Cristo, no
pueden sino desear que otros tambi... [ Seguir leyendo ]
14-17 Juan se encontraba en ese momento en la cárcel; sus
circunstancias, su carácter y la naturaleza del mensaje que había
sido enviado a entregar, llevaron a los que estaban especialmente
unidos a él a guardar frecuentes ayunos. Cristo les remitió al
testimonio de Juan sobre él,Juan 3:29. Aunque n... [ Seguir leyendo ]
18-26 La muerte de nuestros parientes debe conducirnos a Cristo, que
es nuestra vida. Y es un gran honor para los más grandes gobernantes
asistir al Señor Jesús; y aquellos que quieren recibir misericordia
de Cristo, deben honrarlo. La variedad de métodos que Cristo adoptó
al obrar sus milagros, tal... [ Seguir leyendo ]
27-31 En ese momento los judíos esperaban la aparición del Mesías;
estos ciegos sabían y proclamaban por las calles de Capernaúm que
había venido y que Jesús era él. Aquellos que, por la providencia
de Dios, han perdido la vista corporal, pueden, por la gracia de Dios,
tener los ojos de su entendimi... [ Seguir leyendo ]
32-34 De los dos, mejor un demonio mudo que uno que blasfeme. Las
curas de Cristo atacan la raíz, y eliminan el efecto quitando la
causa; abren los labios, rompiendo el poder de Satanás en el alma.
Nada puede convencer a los que están bajo el poder del orgullo.
Creerán cualquier cosa, por falsa o ab... [ Seguir leyendo ]
35-38 Jesús visitó no sólo las ciudades grandes y ricas, sino las
aldeas pobres y oscuras; y allí predicó, allí curó. Las almas de
los más mezquinos del mundo son tan preciosas para Cristo, y
deberían serlo para nosotros, como las almas de los que hacen la
mayor figura. Había sacerdotes, levitas y e... [ Seguir leyendo ]