¿Empezamos de nuevo a recomendarnos a nosotros mismos? ¿Es
necesario? ¿No tengo nada más que mi propia palabra para
recomendarme? San Pablo se propone principalmente aquí a sí mismo;
aunque sin excluir a Timoteo, Tito y Silvano. A menos que necesitemos
... Como si hubiera dicho: ¿De verdad quiero ta... [ Seguir leyendo ]
Vosotros sois nuestra carta de recomendación: más convincente de lo
que podrían ser las palabras. Escrito en nuestros corazones:
profundamente grabado allí y claramente legible para todos los que
nos rodean.... [ Seguir leyendo ]
Manifiestamente declarado que es la carta de Cristo, que él ha
formado y publicado para el mundo. Ministrado por nosotros - A quien
él ha usado aquí como sus instrumentos, por lo tanto, ustedes
también son nuestra letra. Escrito no en tablas de piedra - Como los
diez mandamientos. Pero en las tierna... [ Seguir leyendo ]
Tal confianza tenemos en Dios - Es decir, confiamos en Dios que esto
es así.... [ Seguir leyendo ]
No es que seamos suficientes de nosotros mismos, tanto como para tener
un buen pensamiento; mucho menos, convertir a los pecadores.... [ Seguir leyendo ]
El cual también nos hizo ministros capaces del nuevo pacto, de la
nueva dispensación evangélica. No de la ley, oportunamente llamada
letra, porque Dios la escribió literalmente en las dos tablas. Sino
del Espíritu - De la dispensación del evangelio, que está escrito
en las tablas de nuestro corazón... [ Seguir leyendo ]
Y si el ministerio de la muerte, es decir, la dispensación mosaica,
que lo prueba a los que lo prefieren al evangelio, la mayor parte de
la cual estaba grabada en esas dos piedras, fue acompañada con tanta
gloria.... [ Seguir leyendo ]
La ministración del Espíritu: es decir, la dispensación cristiana.... [ Seguir leyendo ]
El ministerio de condenación - Tal fue la dispensación mosaica que
demostró a todos los judíos que rechazaron el evangelio, mientras
que a través del evangelio (de ahí llamado el ministerio de
justicia) Dios imputó e impartió justicia a todos los creyentes.
Pero, ¿cómo puede la ley moral (que fue la... [ Seguir leyendo ]
No tiene gloria en este respecto, debido a la gloria que sobrepasa, es
decir, ninguna en comparación con esta gloria más excelente. La luz
más grande se traga la menos.... [ Seguir leyendo ]
Lo que queda - Esa dispensación que permanece hasta el fin del mundo;
ese espíritu y vida que permanecen para siempre.... [ Seguir leyendo ]
Teniendo, por tanto, esta esperanza - Estando plenamente persuadido de
ello.... [ Seguir leyendo ]
Y no actuamos como lo hizo Moisés, que se cubrió el rostro con un
velo, lo cual debe entenderse también con respecto a sus escritos.
Para que los hijos de Israel no pudieran mirar fijamente al final de
esa dispensación que ahora está abolida: el final de esto fue
Cristo. Toda la dispensación mosaica... [ Seguir leyendo ]
El mismo velo permanece inamovible sobre su entendimiento: no tanto
como doblado hacia atrás (así lo implica la palabra) para admitir
una pequeña luz resplandeciente. Sobre la lectura pública del
Antiguo Testamento - El velo no está ahora en el rostro de Moisés o
de sus escritos, sino en la lectura... [ Seguir leyendo ]
Cuando ... Su corazón. Se volverá al Señor - A Cristo, por fe viva.
El velo es quitado - Ese mismo momento; y ven, con la mayor claridad,
cómo se cumplen plenamente en él todos los tipos y profecías de la
ley.... [ Seguir leyendo ]
Ahora bien, el Señor, Cristo, es el Espíritu de la ley del que
hablo, al que debía conducir la letra. Y donde está el Espíritu del
Señor, Cristo, hay libertad, no el velo, el emblema de la esclavitud.
Hay libertad del temor servil, libertad de la culpa y del poder del
pecado, libertad para contempla... [ Seguir leyendo ]
Y, en consecuencia, todos los que creemos en él, mirando como en un
espejo - En el espejo del evangelio. La gloria del Señor - Su
glorioso amor. Se transforman en la misma imagen, en el mismo amor. De
un grado de esta gloria a otro, de una manera digna de su Espíritu
todopoderoso. ¡Qué hermoso contr... [ Seguir leyendo ]