Apocalipsis 11:15

Y el séptimo ángel tocó: esta trompeta contiene los eventos más importantes y alegres, y hace que todas las trompetas anteriores sean motivo de gozo para todos los habitantes del cielo. Por tanto, la alusión en esta y en todas las trompetas es a las que se utilizan en las solemnidades festivas. Todas estas siete trompetas se oyeron en el cielo: quizás la séptima se oiga una vez también en la tierra, 1 Tesalonicenses 4:16 .

Y hubo grandes voces - De los varios ciudadanos del cielo. En la apertura del séptimo sello "hubo silencio en el cielo"; al son de la séptima trompeta, grandes voces. Esto por sí solo es suficiente para mostrar que los siete sellos y las siete trompetas no corren paralelos entre sí. Tan pronto como suena el séptimo ángel, el reino cae en manos de Dios y su Cristo. Esto aparece inmediatamente en el cielo y se celebra allí con gozosa alabanza.

Pero en la tierra aparecerán primero varios sucesos espantosos. Esta trompeta comprende todo lo que sigue desde estas voces hasta Apocalipsis 22:5 . El reino del mundo - Es decir, el gobierno real sobre el mundo entero y todos sus reinos, Zacarías 14:9 .

Se ha convertido en el reino del Señor - Esta provincia ha estado en manos del enemigo: ahora vuelve a su legítimo Amo. En el Antiguo Testamento, desde Moisés hasta Samuel, Dios mismo era el Rey de su propio pueblo. Y lo mismo ocurrirá en el Nuevo Testamento: él mismo reinará sobre el Israel de Dios. Y de su Cristo - Este nombre se le da ahora por primera vez, desde la introducción del libro, sobre la mención del reino que recae sobre él, bajo la séptima trompeta.

Fueron ungidos profetas y sacerdotes, pero más especialmente reyes: de ahí que ese término, el ungido, se aplica sólo a un rey. En consecuencia, siempre que se menciona al Mesías en las Escrituras, se da a entender su reino. Se ha hecho - En realidad, todas las cosas (y por lo tanto el reino del mundo) son de Dios en todos los tiempos; sin embargo, Satanás y el mundo actual, con sus reyes y señores, se han levantado contra el Señor y contra su Ungido. Dios ahora pone fin a esta monstruosa rebelión y mantiene su derecho a todas las cosas. Y esto aparece de una manera completamente nueva, tan pronto como suena el séptimo ángel.