Y vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, de modo que Roma bien podría ser llamada "El matadero de los mártires". Ella ha derramado mucha sangre cristiana en todas las épocas; pero al fin se embriaga incluso con él, en el momento al que se refiere esta visión. Los testigos de Jesús - Los predicadores de su palabra. Y me maravillé sobremanera de su crueldad y la paciencia de Dios.

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