Epístola de Ignacio a los Efesios

como el Padre de nuestro Señor Jesucristo también me refresca[20]

Epístola de Ignacio a los Efesios

mí, y "no se ha avergonzado de mis cadenas",[24]

Orígenes de Principios Libro III

¿Corinto, o los que pecaron, y no se arrepintieron de la fornicación, fornicación e inmundicia que habían cometido? ¿Cómo, también, alaba grandemente a los que obraron rectamente, como la casa de Onesíforo, diciendo: "Tenga el Señor misericordia de la casa de Onesíforo; porque muchas veces me confortó, y no se avergonzó de mis cadenas; pero, cuando él había venido a Roma, me buscó con mucha diligencia y me halló. Le conceda el Señor que halle misericordia del Señor en aquel día»[220].

Orígenes de Principios Libro III

en, o los que se habían apartado, y no se habían arrepentido del libertinaje y la impureza de la que habían sido culpables? ¿Y cómo puede bendecir a aquellos a quienes alaba por haber hecho bien, como lo hace con la casa de Onesíforo con estas palabras: "Tenga el Señor misericordia de la casa de Onesíforo, porque muchas veces me confortó, y no se avergonzó de mis cadenas; pero estando en Roma, me buscó con mucha diligencia, y me halló. Le conceda el Señor que halle misericordia del Señor en aquel día»[225].

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